Sobre la salud de mis hijos hay tanto que contar que creo que podría hacer otro blog sólo con eso, pero intentaré no aburriros. El mayor nació con lo que parecía un pliegue en el paladar y el médico se preocupó mucho por si era paladar hendido pero afortunadamente era superficial. Yo me había pasado cinco meses del embarazo vomitando, así que no me hubiera extrañado. La segunda nació con un soplo cardiaco. Con ella pasé sólo tres meses. El parto fue ultra rápido porque la matrona se tenía que ir. Pensé si pudo ser por eso. La pequeña nació con un bulto en el cuello por una contractura al nacer y nos dió un buen susto.
A los dos años el chico tuvo principio de neumonía, pero fue solo el primero de cinco en años sucesivos (no exagero nada), la segunda tuvo tres neumonías, y la pequeña se conformaba con bronquitis espásticas que le hacían vomitar cuando se acostaba. La mayor fue ingresada a los dos años con gastroenteritis, la pequeña a los pocos meses con bronquiolitis y el mayor a los diez años con apendicitis. A los siete años la niña pequeña tuvo púrpura infantil. El chico y la pequeña se rompieron sendos brazos un año tras otro a los catorce y ocho años respectivamente. Como véis no teníamos tiempo para aburrirnos.
Qué cúmulo de accidentes vaya, al menos le das un toque informal al quitarle importancia, al fin y al cabo es algo pasado y ahora por suerte hay salud, espero.
ResponderEliminarUn saludo.
Con la adolescencia se fueron todos los achaques. Un beso
EliminarCon los peques es así, una tras otra.
ResponderEliminarBesos
Mi hija myor además tenía asma. Un beso
EliminarHola.
ResponderEliminarPues sí que te han dado quebraderos de cabeza. Los míos tuvieron varicela y con 19 años mononucleosis, lo único.
Muy feliz semana.
Qué suerte tuviste. Un beso
EliminarYa pasó. También he tenido mis sustos y con la pequeña sigo. Es alérgica al trigo, al polen, al huevo, frutos secos casi todos, intolerante a la lactosa y tiene asma extrínseca ya muy controlada.
ResponderEliminar¿Qué tal?
Besos.
Pues eso me temo que es para siempre. Un beso
EliminarSobre todo los primeros años, los niños dan muchas preocupaciones con las enfermedades propias de la infancia. generalmente no son enfermedades importantes, pero está claro que los accidentes como las roturas de brazos o piernas son mas complicados, al requrír yeso y su tiempo de reposo.
ResponderEliminarAbrazo.
Fueron peores las neumonías y las gastroenteritis. Un beso
EliminarEn ese sentido yo tampoco tuve tiempo de aburrirme aunque sí de pasar muchos sustos y preocupaciones con mis doa hijas que también tuvieron de todo incluídos ingresos en hospiltales.Besicos
ResponderEliminarY tendinitis todas las que había, los míos. Un beso
Eliminar¡Caramba, si han tenido mala suerte! Por fortuna se ha ido solucionando. Un abrazo.
ResponderEliminarPerdieron muchísimas horas de clase. Un beso
Eliminarvaya, qué mal lo tuviste que pasar. :( esas cosas a la larga te dan experiencia y te hacen más fuerte, pero en el momento de pasar por ello es complicado...
ResponderEliminarbesos
A todo se acostumbra uno. Un beso
EliminarSí que lo has pasado mal.
ResponderEliminarAfortunadamente, ahora todo va bien.
Un abrazo.
Tuviste momentos de gran angustia. Qué fuerte.
ResponderEliminarBesitos de anís.
Cuanta paciencia necesita una madre y también salud para bancar tantas enfermedades.
ResponderEliminarmariarosa
Fue muy duro pero por suerte pasó. Gracias por vuestro apoyo. Besos
ResponderEliminarLas madres siempre preocupadas y pendientes de los hijos.
ResponderEliminarUn abrazo.