¨La verdad nos hará libres” (Juan 8:31) ¿Por qué le temen a la verdad?
Apreciados hermanos en la fe católica.
En esta carta quiero invitarlos a
reflexionar sobre el terrible momento que vive nuestra Iglesia, predicho
en muchos lugares del mundo en los cinco continentes por la Santísima
Virgen María a través de videntes reales y aprobados por la propia
Iglesia como en Fátima (Portugal), La Salette (Francia), Akita (Japón),
Garabandal (España), Padre Gobbi del MSM, etc.
Estoy muy seguro que el Cielo habló a
través de ellos. No te dé miedo afrontar las tristes realidades que vive
la Iglesia. Hacer negación de los hechos actuales es un pecado de
omisión.
La creciente apostasía, las herejías, la
desacralización del templo y de todos los aspectos de nuestra religión,
la relajación de la moral incluso en el clero, la gran cantidad de
abusos sexuales, la complacencia de la jerarquía ante todo lo LGBTIZ, la
degradación y relativización de los Sagrados Sacramentos, la corrupción
intraeclesial para elegir un “papa”, el show mediático en que se ha
convertido la Santa Misa para agradar al hombre a costa de desagradar a
Dios, el andar como ovejas sin pastor, la manipulación de los contenidos
de la Palabra de Dios para adaptarlos al mundo, el rechazo al Catecismo
de la Iglesia Católica y al magisterio de los anteriores y verdaderos
papas, los irrespetos a la Santísima Virgen María…, ¿no son suficientes
señales de alarma para ti? ¿No te das cuenta? ¿No estás enterado de la
gravísima situación que vive el Cuerpo Místico de Cristo? ¿De verdad no
te importa todo este panorama desolador, toda esta destrucción? La
situación no se la ha inventado ninguna persona enemiga de la Iglesia,
no es un complot contra ella, no es una conspiración contra la Iglesia.
Simplemente es la verdad verdadera.
Ignorar voluntariamente por comodidad o
falta de formación toda esta realidad puede llevarte al infierno. Así de
claro y directo. La iglesia no es solamente el párroco o el obispo. No.
La iglesia es universal y si somos católicos debemos cuidarla. No seas
más de esos católicos que van a misa el domingo a las 10 de la mañana y
que en toda la semana se esconden de Dios sin asumir ningún compromiso
con la salvación de su alma. No seas un “pagano bautizado”… las almas de
éstos se condenan si no viven en gracia de Dios. No pienses más: “yo
soy muy buen católico, cumplo y no me interesan los problemas y
dificultades que vive la Iglesia. Que los arreglen ellos”. ¡Cuidado! La
comodidad y la falta de interés tampoco ayudan a la salvación de tu
alma.
Las dificultades actuales no son solo de
unos obispos y un “papa” allá lejos en el Vaticano. No. También están
en tu parroquia como consecuencia de lo que sucede allí a la distancia.
Muchos párrocos están cometiendo herejía, están en apostasía,
desacralizan el templo, cambian arbitrariamente la liturgia, hacen
afirmaciones blasfemas, convierten en espectáculo la Santa Misa,
tergiversan la Palabra de Dios para hacerla decir lo que no dice y
adaptarla al mundo, etc. Es hora de que abras los ojos y abandones tu
pasividad y silencio. ¿Qué estas esperado? ¿Ver para creer como Tomas?
¿No es suficiente con la impiedad que ves en las misas a las que
asistes?
Los templos, poco a poco están siendo
convertidos en lugares de conciertos, conferencias, banquetes, teatro y
muchas otras actividades mundanas como si Dios no estuviera en su
Cuerpo, Sangre, Alma, Espíritu y Divinidad en el Sagrario.
Las homilías utilizadas para promover,
aprovechando la ignorancia de los feligreses, temas de otras religiones
como la compasión budista; o el falso ecumenismo, la tolerancia con todo
lo LGBTIZ, la meditación trascendental, etc. Y no falta el “sacerdote” –
tal vez usted se ha dado cuenta o no se ha dado cuenta – que aproveche
las misas dominicales para, en ese momento, con un estudiado tono de
voz, hacer control mental a la feligresía. Ellos saben que muy pocos lo
notaran y si alguien dice algo o llama la atención al sacerdote, es
calificado de inmediato como fanático. Desafortunadamente la mayoría
nada en la ignorancia y no quieren saber nada “para no preocuparse”, o
también están en esas prácticas luciferinas.
Esta carta te la escribo hermano laico
porque me preocupa la salvación de tu alma. Debes preocuparte por
conocer más la Iglesia, la Doctrina, el Magisterio, la moral católica,
la Tradición, la Liturgia. Si no sabes nada de estos temas tu alma está
en riesgo, en un riesgo muy alto de perderse. Es lo mismo que acudir a
un restaurante sin fijarse en los detalles de higiene, calidad de los
alimentos, quién sirve, cómo sirven, la preparación y comerse lo que sea
a costa de enfermarse y hasta morir. En lo espiritual sucede igual: si
tú vas a un templo contaminado donde se promueven herejía, apostasía,
pro LGBTIZ, donde se fomenta una falsa doctrina católica, el falso
ecumenismo, etc., debes dejar de ir. Hay muchos templos, busca uno donde
se respete la Sana Doctrina Católica, los dogmas, la liturgia, el
Magisterio, la moral y quédate ahí.
Nunca te vayas de la Iglesia Católica.
Hacerlo es un altísimo riesgo para tu alma. Si hay dificultades graves
en la Iglesia Católica que es la verdadera, ¿cómo estarán las demás que
no tienen el verdadero y Único Dios? Quédate siendo católico, pero
conviértete en un defensor de la sana Doctrina Católica una vez que te
hayas preparado para hacerlo.
Busca un grupo de oración de sana
doctrina. Sé que no es fácil hallarlo, pero ora, pide al Señor y a la
Virgencita que te ayude a encontrarlo. Lo lograrás.
Ora mucho. Ora el Santo Rosario. Tenga
vida sacramental. Sirva a los demás practicando las obras de
misericordia. No te comprometas en nada con la falsa iglesia que ya
pulula sobre el mundo y amenaza la salvación de las almas. Pide al
Espíritu Santo que te llene del don del DISCERNIMIENTO, que es
absolutamente necesario en esta época de confusión, irreligiosidad,
relativismo e impiedad.
¡Ánimo hermano! ¡Haz algo para salvar el Cuerpo Místico de Cristo! El premio es la eternidad.
DAVID DE JESUS
https://comovaradealmendro.es/2019/04/16/carta-abierta-de-david-de-jesus-a-los-laicos-catolicos-reaccionen/?fbclid=IwAR0Q6bYtCzC-jQ-OyOh4wzVFAg474ndrpXuCeiwyag3kaQq8x3RIQoXf-8c
Yo en mi parroquia no vivo todo lo que dice esta carta, tenemos un excelente párroco y si bien es verdad que cada año va menos gente a la iglesia pero creo sinceramente que es debido a la propaganda tan anticlerical y antirreligiosa que contínuamente se esta dando en nuestra sociedad y en los medios informativos.Besicos
ResponderEliminarDepende del párroco y que respete la tradición. Un beso
EliminarLa crisis es generalizada, si degeneró el hombre, no podían quedar exentas las religiones, puesto que las manejan los hombres.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tienes razón. Un beso
EliminarManuela. El artículo no es mío peto fue Jesúw quien condenó la homosexualidad.
ResponderEliminarMadre mía , qué cosas dices. Jesús vino a predicar el amor entre todos y no el odio. Quien te haya dicho eso que te explique dónde Jesús vuelve la cara a alguien. Jesús vino a rehacer una alianza, una alianza de paz, de protección, de amor, no de condenas y odios. Reflexiona.
EliminarLéete la Biblia. Jesús no era ningún hippy.
EliminarHay párrocos y párrocos, estoy totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarEl hombre tiene el poder de transformar, la historia, de enriquecerla o de cargarsela.
Feliz domingo Susana.
Un beso
Yo tengo la suerte de haber encontrado uno tradicional. un beso
EliminarFeliz Domingo de Resurrección.
ResponderEliminarBesos.
Gracias. Un heso
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