Durante veinte años guardé en el trastero toda la ropita que usaron mis hijos durante los tres primeros años de vida, por si acaso me quedaba embarazada sin esperarlo. Como ya tengo cincuenta y dos años y casi ninguna posibilidad de tener más hijos, he decidido entregar esa ropa a una asociación para madres solteras. Así que el otro día bajé al trastero a recoger las cajas de ropa donde lo tenía todo perfectamente guardado por fechas y tallas. Me dió mucha lástima abrir las cajas y ver los pijamitas, y los vestiditos y las sabanitas que utilizaron mis hijos uno tras otro, pues muchas las compartieron.
Sin embargo, no tiene sentido desperdiciar todo eso, pudiendo todavia reutilizarlo personas necesitadas. A los nietos, si vienen, nos hará ilusión comprarles cosas nuevas como todas las madres. También guardamos sus juguetes preferidos en el trastero, aunque muchos ya los he ido entregando en campañas navideñas. La verdad es que el trastero es como un viaje en el tiempo. Está también la cuna y el cochecito y me cuesta mucho desprenderme de ellos, pero entiendo que acumular cosas innecesarias, además de ser poco práctico, también puede convertirse en un trastorno.
El nombre ya lo dice todo, trastero. Solo guardé alguna cosa que luego les di a mis hijas. Un abrazo
ResponderEliminarEn el mío no se puede ni entrar. Un beso.
EliminarEs bueno compartir y mucho mejor con gente que lo necesita, estarás haciendo algo muy grande, ánimo esa cunita merece un bebé que la disfrute.
ResponderEliminarAbrazote utópico, Irma.-
Es lo siguiente que tengo que sacar. Un beso.
EliminarSí es el baúl de los recuerdos y no hay más remedio que hacer limpieza de vez en cuando.
ResponderEliminarUf. Mucha limpieza va a ser eso. Un beso.
EliminarPues yo no tengo ropa de niños pero sí mía, esperando que algún día me vuelva a valer... A ver si para cuando haga el cambio de armario me dedico a separar para donar todo lo que sé a ciencia cierta que ya no voy a poder volver a usar. Jajajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarYo también guardaba talla 42 y la di. Un beso.
EliminarHoy vivimos en un mundo de consumo, los recién nacidos, ademas de disponer de mucha ropa que compran sus padres, reciben ropas de regalo que en muchos casos se guardan nuevas y sin usar.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo en donar todo lo que ya no vamos a utilizar, por desgracia son muchos los hogares que lo necesitan.
Un abrazo.
Es cierto. Tienen demasiada. Un beso.
EliminarMis nietas ahora juegan con los juguetes de sus madres (mis hijas) que yo les guardé y sigo guardando en mi casa así cuando vienen tienen con qué jugar.Todo lo demás excepto alguna ropilla que guardo de recuerdo lo regalé.Besicos
ResponderEliminarYo también pienso dejar juguetes. Un beso.
EliminarMi madre hace lo mismo que tu
ResponderEliminarSe lo he llevado a Red madre. Un beso.
EliminarHola!! Yo también opino que es mejor que alguien la aproveche.
ResponderEliminarYo tengo un par de amigas que tienen hijos algo más pequeños que el mío y cuando hago cambio de armario o se le queda pequeño, les voy dando directamente.
Muy bien. Un beso.
Eliminarinteresante como ves la vida
ResponderEliminarun abrazo desde Miami
Muchos la vemos así. Un beso.
EliminarA reglarar todo eso, muchacha. Que hay muchos niños que necesitan mucho apoyo. Ojalá todo sirva todavía, pasó mucho tiempo. Yo no sé guardar... a veces ni lo que traigo puesto conservo. No falta a quién.
ResponderEliminarUn abrazo gigante ⭐
Está todo muy cuidado. Un beso.
EliminarNo guardes, que siempre hay alguien que lo necesita. Haces bien en regalarlo.
ResponderEliminarmariarosa
Hay cosas en el trastero que ya no quiere nadie. Un beso.
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